Las TIC en educación, ¿una tiza más o algo más que una tiza?

José Ortega Mohedano

Twitter

Puntual a su cita anual, la Fundación Orange ha publicado recientemente su Informe eEspaña sobre la sociedad de la información española. Esta vez, conmemorando la décima edición y procurando ofrecer un panorama de lo acontecido en España desde su nacimiento, el Informe eEspaña 2010  viene acompañado de una edición especial.  Informe balance de una década, para el que han contado con la colaboración de más de un centenar de “amigos, arquitectos de la sociedad de la información”, según recoge en su prólogo Luis Alberto Salazar-Simpson, Presidente de la Fundación Orange.

En el apartado sobre la “eEducación” española, Inma Tubella, Rectora de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), realiza una reflexión sobre, en sus palabras, los jóvenes nativos digitales, como precursores del cambio global debido al impacto de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en nuestra sociedad. Esos que, habiendo “…nacido con Internet y, usuarios intuitivos de la tecnología, no son capaces de imaginar un mundo sin ella” (Tubella, 2010, p. 165).

Su autora, en una notable reflexión sobre el aprendizaje para el siglo XXI, subraya la creciente importancia, ya una realidad, de las comunidades de aprendizaje informal que funcionan en paralelo a los sistemas de educación reglados, “especialmente en la enseñanza superior, donde la autonomía del estudiante es mayor” (ídem, p. 166). Educación informal, de carácter experimental e innovador, más provisional y flexible, que la permite “evolucionar y reaccionar más rápidamente” que a su hermana más formal. Y si es especialmente en la enseñanza superior, cabe preguntarse si no pinta que la universidad del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) va a tener que ponerse al día y fijarse en su hermana más cool. Porque, como muestran estudios recientes, los espacios colaborativos de trabajo (comunidades de aprendizaje informal formados por personas con intereses comunes) “…son eficientes espacios de aprendizaje” (idem, p. 176). Y si la respuesta es afirmativa, entonces, como bien indica Inma Tubella, debemos preocuparnos, en general, en plantearnos la pregunta de si “…sabemos qué ocurre cuando diferentes formas de soporte (media) se integran de manera complementaria en el proceso de aprendizaje” (ibídem). En otras palabras, ¿sabemos qué ocurre cuando integramos las TIC en el aula? Estamos hablando de ¿una tiza más o de algo más que una tiza?.

Hablamos de integrar las TIC en todos los procesos de aprendizaje, en los currículos educativos; también del uso que el profesor hace de las mismas en el aula y del impacto que estas tienen sobre los conocimientos adquiridos por el alumno. Porque, según Tubella, “…las TIC no son un nuevo instrumento, sino una nueva cultura”, que nos obliga a “…repensar el modelo de aprendizaje y la misma estructura institucional, especialmente..”, debemos subrayar la insistencia de la autora al respecto, “.. en el caso de la educación superior” (ídem, 168). Por lo que, si estuviera en lo cierto, no cabe otra cosa que preguntarse, también, ¿con qué cultura organizativa nace el nuevo EEES? Porqué es nuevo, sí; novedoso en estructura organizativa, en metodologías, en procesos educativos, etc. Pero, ¿lo será también en tecnologías, o en esto seguirá siendo el viejo hermano conservador? Porque, como bien dice González Soto, algo hay que no funciona “…y quizá por ello el empeño en generar esta nuevo Espacio Europeo. Y entre las cosas que no funcionan está el uso de las herramientas y los procedimientos…porque hacerlo supondría cambiar el qué y el cómo se enseña” (González Soto, 2007, p. 5). Y más pensando en un futuro, obligado, de aprendizaje a lo largo de toda la vida, por lo efímero, accesible, compartido y libre que es el conocimiento hoy adquirido. Creo, humildemente, que al viejo hermano, o hermana, no le va a quedar más remedio, que renovarse…o morir.

BIBLIOGRAFÍA

· Gónzalez Soto, A.P. (2007): Las tecnologías de la información y la comunicación y el Espacio Europeo de Educación Superior. En: Cabero J. y Barroso, J. (Coords.) (2007): Posibilidades de la teleformación en el espacio europeo de educación superior. Granada: Ed. Octaedro Andalucía, págs. 5-20.

· Tubella, I. (2010): Los jóvenes, precursores del cambio educativo. En: Gimeno, M. (Dir.)(2010): eEspaña 10 años, Madrid: Fundación Orange, págs. 165-172. <www.fundacionorange.es> [Consulta: 12 de julio de 2010]

 

Citar como:

Ortega, J. (2010): “Las TIC en educación, ¿una tiza más o algo más que una tiza?”. SCOPEO, Observatorio de la Formación en Red. Boletín SCOPEO, 23, 16 de Julio de 2010. En línea:

 

Tags: