“Debemos formar a los padres. En internet hay mucha pornografía intelectual”

Julio Cabero Almenara

(3ª Parte de la entrevista)

(Ficha personal y Grupo de Investigación)

Vea la 1ª parte de la entrevista en Canal Youtube del Observatorio Scopeo

Destacamos…

José Ortega:- Empujado por las Nuevas tecnologías,  ¿considera que existe una convergencia de modelos educativos?, ¿vamos hacia un modelo único?, ¿un único Campus, quizá?

Julio Cabero: -Yo creo que eso sería malo, podemos caer en el riesgo de que las tecnologías globalicen y unifiquen a las personas, yo siempre he sido más partidario de la diversidad, el asumir que puede haber sobre una problemática diferentes puntos de vista y sobre todo cuando hablamos del campo de las Ciencias Humanas siempre suele haber. Lo que sí es cierto, es que las tecnologías nos van a permitir que en un momento determinado, una escuela o una formación,  que su único fin respondía  a que un estudiante aprendiera unos  conceptos que eran muy estables y que luego los reprodujera,  las tecnologías lo que están es introduciendo es una fuerte variable en la escuela y esta es la velocidad y el cambio de ritmo.

La velocidad con la que cambian los contenidos, la velocidad con que cambian la información, sino existieran las tecnologías no llegarían a la escuela y eso lo que supone es que la escuela de hoy en día tiene que ser una escuela mucho más dinámica, una escuela mucho más flexible y una escuela que asuma que el acto de formación no solamente se lleva dentro de los contextos formales, sino que también dentro de los contextos informales, y en esos contextos informales, las tecnologías juegan un papel absolutamente impresionante.

J.O: -¿Podemos atrevernos a decir, que habrá un flujo de información más fluido gracias a las TIC desde Primaria hasta la Empresa?

J.C:- Totalmente, pero desde mi punto de vista, eso tiene una serie de problemas para la escuela. Es decir, una de las grandes ventajas que tiene la tecnología, es que se aumenta el volumen de información  y  los sistemas simbólicos con los cuáles tú puedes trasladar esa información  y ya no solamente puedes trasladar información textual, sino información audiovisual, información audio, etc… Pero también esa gran ventaja de poner rápido a disposición esa información, implica un problema para la escuela y es  en primer lugar, el cómo tiene que formar al estudiante.

Posiblemente, antes, cuando nosotros entramos en nuestra Universidad, nos formaban en cómo teníamos que localizar la información, cómo teníamos  que entrar en una biblioteca, pero  ahora, la cuestión no es capacitar a los alumnos tanto para buscar información sino para  que tengan la capacidad de evaluar la calidad de la información con la que se encuentran. Muchas veces el alumno cree que investigar es igual a Google, donde pone 4 cosas y lo copia lo primero que le sale. Ese va a ser el gran reto debido a que hay tal cantidad del volumen de información que posiblemente tengamos que formar a las personas en nuevas dimensiones y en nuevas competencias y una va a ser esa, una alfabetización mediática y una competencia para evaluar y discriminar esa información, pero no cabe duda, que el volumen de información que pongan a disposición de los alumnos y de la escuela es impresionante, esto además, es un reto para el profesor, que puede que el alumno tenga la información  incluso antes que él mismo.

J.O: – Hablaba de Formación continua a lo largo de la vida, en el profesorado, el alumnado, etc. ¿Cree también necesaria la formación de los padres?

J.C.: – Evidentemente. La formación de los padres en el ámbito de las tecnologías, es completamente necesario a varios niveles. En Primer lugar, es que de todas las cosas que hay evidentemente e internet, muchas veces se trata de pornografía intelectual y la función que puede hacer la familia ante esto es la de asesores, y en segundo lugar, es la existencia de cierto mimetismo (aunque no hay una correlación directa entre que el niño lea porque ve que sus padres leen), digo cierto mimetismo desgraciadamente muchas veces porque el paralelismo no es directo, pero sí hay una cosa que es importante es que si el padre utiliza las tecnologías sin un miedo atroz, no tiene reparo a que el niño esté hablando en tuenti, pero luego ve que en un momento determinado aparecen en los medios de comunicación agresiones, violaciones… Ante esto, si el padre le pierde miedo a esa tecnología, conoce la tecnología, sabe las posibilidades que tiene la misma, evidentemente podrá formar más a sus hijos para que sean más competentes en un “uso sostenible”,  de esa parte de las tecnologías. Yo creo que eso es absolutamente básico, lo mismo que al profesorado, lo que pasa que en el profesorado tendríamos que cambiar las reglas del juego muchas veces no es que sea tan competente en el dominio puramente instrumental de la tecnología, sino que sea competente para saberla utilizar dentro de su práctica educativa y ahí tendríamos que cambiar muchas de las direcciones en las cuales se ha hecho el esfuerzo para incorporar las tecnologías.

J.O: – Y también como usted dice, “menos memoria y más conocimiento”.

J.C:- Estamos en un sistema educativo, donde la memoria se le está atacando mucho, yo creo que la memoria, como habilidad cognitiva que es, se debe seguir manteniendo, lo que yo digo, es que  si en una sociedad post-industrial, el papel de la escuela consistía en hacer que el alumno memorizara unos contenidos, entre otros motivos, porque esos contenidos eran durante bastante tiempo, puramente permanentes, debemos admitir que estamos en un modelo donde los contenidos están cambiando muy rápidamente y es posible que no sólo tengamos que tener como referente el que el alumno memorice esos contenidos, sino que el alumno sea capaz de construir nuevos conocimientos. Yo digo algunas veces que el alumno del futuro debe de tener tres capacidades básicas, una la capacidad de aprender, otra es la capacidad de desaprender y la de reaprender los contenidos. La memoria, es importante, pero ya no es el elemento básico de referencia del sistema educativo, pero si es importante. Yo creo que muchas veces nos equivocamos, hemos pasado de una escuela de total importancia a querer devaluarla al 100% y yo en eso no estoy de acuerdo. Me parece que también es importante potenciarla.

J.O:- Cuando habla de Brecha digital, viene a ser optimista en torno a la misma, ¿por qué?

J.C:- Porque afortunadamente la calidad de la sociedad viene siendo mejor. Yo procuro ser optimista, es lo que decía antes: ese viejo dicho no me lo creo. Creo que las cosas cada vez van siendo mucho mejor. Y la prueba es, cuando hasta hace relativamente poco tiempo, Internet existía en unos pocos sitios. Cada vez llega más a los pueblos, cada vez Internet está sirviendo para que se hagan experiencias más importantes. El mismo centro donde nosotros nos encontramos (CITA), un centro de alta calidad, de alta tecnología, y está ubicado en un pueblo. Por tanto yo, viendo esas cosas, tengo que ser optimista, y creo que la brecha digital cada vez, si hacemos más esfuerzos, se va ir acortando. Sí evidentemente no hacemos esfuerzos, evidentemente se va a ir ampliando.

J.O:- ¿Cree que es importante que existan centros como el CITA?

J.C:- Yo, sinceramente, me estoy quedando verdaderamente sorprendido. Conozco varios centros nacionales e internacionales y yo dirijo también un centro en mi Universidad, de tecnología. Pero no lo que estoy viendo por tecnología, porque las tecnologías son más o menos las mismas. Lo que estoy viendo es como maduran la idea de utilizar las tecnologías. El volumen de folletos de actividades, dirigidas a diferentes personas, diferentes colectivos, desde personas adultas hasta críos. Eso es lo importante. La tecnología dura muy poco. La muerte de una tecnología en la sociedad actual es muy rápida. Sino piense, si usted se compró hace un año un ordenador, ahora se lo compra mucho más barato, hace cosas más rápidas y con más posibilidades. O lo que pasa con los móviles. La tecnología no es lo importante, lo importante es lo que queremos y lo que se hace con las mismas. Es lo que me está gustando del centro.

J.O:- Su opinión, por favor, sobre “calidad y rentabilidad en la educación con las TIC”.

J.C:- Es un tema peliagudo, porque no hay una relación directa entre incorporar mucha tecnología en los centros y automáticamente conseguir un incremento en mayor número de calificaciones académicas por parte de los alumnos. Yo soy más partidario de una visión sistémica. Percibir que en la educación se tienen que tocar diferentes variables. Si uno incorpora tecnología, pero por ejemplo no forma al profesorado, o no establece medidas para que el alumnado pueda acceder cómodo, o no cambia las estructuras organizativas en las cuáles se apoya ese centro, posiblemente no haga nada. Uno tiene que ver que los problemas educativos son sistémicos y tiene que ir tocando diferentes claves: estructura organizativa, tecnología, etc. Después de esto, yo percibo que aquellos centros que incorporan tecnologías, que el profesor utiliza una serie de estrategias y metodologías para crear nuevos sistemas de comunicación y que el alumno realiza con la tecnología, no solo ser un consumidor de información, sino generar nuevos modelos, resolver problemas, aplicar metodologías como el estudio de caso… esos centros, son centros donde los resultados académicos y los niveles de satisfacción son verdaderamente significativos. Nosotros acabamos de terminar una investigación sobre el uso de elearning en todas las universidades andaluzas, un estudio de excelencia financiado por la Consejería de Educación, y una de las cosas que nos hemos encontrado es que el nivel de satisfacción que los alumnos muestran por trabajar en Internet es absolutamente positivo. Luego, ya ahí tenemos de entrada una variable importante para incorporar las tecnologías. Los alumnos cuando se salen de esas cosas, no sólo el subir un documento en PDF, en HTML, sino que hacen cosas en esa nueva herramienta que es muy potente y que te permite hacer diferentes tipos de cosas, la enseñanza aumenta y es una enseñanza de calidad. Todos los profesores de buenas prácticas que nosotros evaluamos y entrevistamos nos reconocieron que había habido un incremento en el rendimiento académico alcanzado por los estudiantes.

J.O:- Por concluir, una última reflexión sobre TIC y Educación.

J.C:-  Afortunadamente cada vez me encuentro menos un discurso tecnológico y cada vez más un discurso pedagógico sobre las tecnologías. Eso es lo que va a hacer que esto pueda cambiar verdaderamente los escenarios de formación. Y por supuesto, daros las gracias por entrevistarme.

Citar como:

SCOPEO (2010). “SCOPEO: Las TIC y la educación: reflexiones. Entrevista a Julio Cabero Almenara, 3a Parte”, por José Ortega Mohedano. Entrevistas SCOPEO (transcripción), Boletín Scopeo nº 24, 3 de Agosto de 2010. En línea en:

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