Trabajo colaborativo, redes sociales y educación artística: Presentando Queremos MusicArte.Sociedad del Aprendizaje y la acción

Camino López García @caminologa

Experta en TIC aplicadas a la Innovación, Creatividad, Investigación y Desarrollo de proyectos

 

En tiempos tan complejos como los que vive el mundo educativo lleno de recortes y leyes es admirable ver cómo algunos profesionales de la educación, cada vez más y a pesar de todo, siguen con ganas de innovar y de luchar por algo que consideran que es su responsabilidad: preparar a las nuevas generaciones para un futuro cada vez más incierto.

Las TIC no solo han llegado para traernos pizarras digitales interactivas, mesas de luz interactivas, libros digitales interactivos… más que la era de la Información y la Comunicación o del Aprendizaje y del Conocimiento (TAC) parece la era de la interacción. Y es que no vamos tan desencaminados. George Siemens ya humanizaba las máquinas diciendo que toda la tecnología tiende a estar conectada y no solo eso, sino que Dolors Reig viene ya desde hace un tiempo augurando que la revolución está en lo social.

El conectivismo es la base

Y es que no podemos negar que el conectivismo ha cambiado la realidad en esta nuestra profesión. Las redes sociales son potenciadoras de la unión entre profesionales de todas las etapas educativas, áreas de conocimiento y geografías. Las teorías de la generación de comunidades gracias a su “efecto contagio” y el “efecto multiplicador” (Fowler, 2011), la “arquitectura de la participación” (O’Reilly, 2005) para la construcción de redes de contactos que acaba formando Ecosistemas de Aprendizaje (Freire, 2011) y que constituyen nuestro PLN (Personal Learning Network) se han convertido en pasos básicos e invisibles (Cobo, 2011) que todos estamos imitando de manera casi inconsciente, para tejer esta red de contactos que nos mantiene activos.

Trabajo colaborativo

Y es que en un contexto diferente no podría haber sido posible encontrarnos un auge tan significativo de la palabra “Colaborativo”. Nos encontramos en el caldo de cultivo perfecto para esta acción que dista mucho de los conceptos grupal y cooperativo. No solo la conectividad entre las personas sino la disponibilidad de espacios gratuitos donde poder trabajar nuestras ideas en común (herramientas de Google,…) hacen que la puerta de la innovación en la educación no se cierre a pesar de todo.

La realidad de las enseñanzas artísticas: LOE, LOMCE y PISA

Es el caso de la realidad de un colectivo no menos castigado por todas las políticas educativas: los profesionales de la educación artística en todas sus vertientes. La última ley educativa que todavía se conserva (LOE) y la creciente LOMCE se han encargado de hacer de esta rama del saber una de las peor valoradas y consideras de todo el espectro educativo. En la LOE la materia de educación artística solo es obligatoria en dos de los cuatro cursos de la ESO, saltándose uno en el que no existe, lo que rompe la continuidad de la asignatura. Además, cuando se la oferta en el nivel de 4º, ésta tiene que competir con asignaturas del calibre de una segunda lengua extranjera, tecnología e informática, las cuales tienen mucho más prestigio en la actualidad.

Las reducciones de plantilla, la falta de especialización de parte del profesorado encargado, la reducción de las horas lectivas y la denigración de las asignaturas responsables a categoría de no obligatorias están generando grandes repercusiones sociales, las cuales ni siquiera se constatan por iniciativas evaluadoras de tal calado como el informe PISA que no ha evaluado el impacto negativo que están teniendo estas políticas sobre las artes. El PISA es el Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos de la OCDE,

“(…) tiene por objeto evaluar hasta qué punto los alumnos cercanos al final de la educación obligatoria han adquirido algunos de los conocimientos y habilidades necesarios para la participación plena en la sociedad del saber” (OECD, 2011: 1).

Las pruebas de evaluación se realizan cada 3 años y cada año se evalúa en concreto una temática. En el 2000 fue la lectura, en el 2003 las matemáticas, en el 2006 ciencias y en el 2009 otra vez lectura. En el 2012 se evalúan las matemáticas y en el 2015 otra vez las ciencias. Resulta bastante esclarecedor que a pesar de que la propia organización explica en su página web que “evalúa todas las habilidades y conocimientos necesarios para la participación plena en la sociedad” (OECD, 2011: 1), en ningún momento ha evaluado las artes y solo se centra de manera repetitiva en las áreas de lectura, matemáticas y ciencias. Otenidos del PISA 2009, resulta impresionante ver cómo ni siquiera sale reflejada en el informe ninguna mención a ninguna de las materias de arte o capacitaciones o competencias en educación artística. Esta realidad supone una gran negligencia si tenemos en cuenta una de las principales preocupaciones y líneas de investigación de la NAEA, la organización para la defensa de las enseñanzas artísticas más importante a nivel mundial. Emitió un informe en el cual expone las líneas de investigación principales entre las cuales se ve reflejada:

“¿Cuál es el impacto en Educación Artística de los nuevos contextos de aprendizaje propiciados por las tecnologías de la información y la comunicación?”

La importancia de las artes: el momento decisivo es ahora

Pero en cambio no son pocos los que aseguran que el futuro no solo será multidisciplinar sino que las capacidades artísticas tendrán un peso importante en las habilidades y competencias requeridas para un buen desarrollo laboral de los ciudadanos. No solo empresarios o visionarios sino intelectuales de la categoría de Curtis Johnson, Ken Robinson, Linda Darling-Hammond, Robert Roeser o Daniel Pink, entre muchos otros, llevan años avisándonos de que “Las escuelas matan la creatividad”. En la realidad en la que vivimos donde toda la información está accesible, tenerla grabada en nuestros cerebros no aporta ningún valor añadido siendo el desarrollo de nuestros propios talentos lo que marca la diferencia.

“El mundo cambia a una velocidad vertiginosa. Es imposible adivinar cómo viviremos en el futuro. Lo único que sabemos es que hará falta mucha imaginación y creatividad para transformarnos y afrontar los nuevos retos.”
(Robinson, 2009: contraportada “El Elemento”).

En este contexto tan rico en posibilidades de cambio y con el apoyo tecnológico, el colectivo de profesores de educación artística pone en marcha su propia lucha. Son alentadoras algunas palabras acerca de la realidad en la que nos encontramos:

“Estamos asistiendo a un momento verdaderamente brillante y decisivo en la investigación en Educación Artística”
(Marín Viadel, 2011)

Ahora sí: Queremos MusicArte

Pero la responsabilidad de educar íntegramente a un individuo es de todos, por ello, se ha creado una iniciativa en forma de proyecto colaborativo capitaneada por una reivindicativa profesora de artes, Inmaculada Contreras Sedes (@inmitacs) pero que no podría ser posible con el apoyo no solo ya del colectivo de educación artística, sino del resto de profesionales de todas las etapas educativas y de todas las demás ramas del saber. Así nace Queremos MusicArte.

Tomando las palabras de Ken Robinson, experto en creatividad, innovación y asesor de sistemas educativos, Queremos Musicarte considera fundamental la implicación de todo el profesorado:

“(…) la mayor parte de nuestros sistemas educativos están desfasados. Son anacrónicos. Se crearon en el pasado, en una época distinta, para responder a retos diferentes.(…), en la mayoría de sistemas, se insiste mucho en elevar los estándares de matemáticas y de lengua, que por supuesto son muy importantes, ¡pero no son lo único que cuenta en la educación! Las disciplinas artísticas cuentan, las humanidades cuentan, la educación física también…”
(Robinson, 2011)

Profesores de toda España y algunos de Iberoamérica nos estamos dando cita en este proyecto colaborativo multidisciplinar que arranca con fuerza con un único objetivo: “la colaboración de todos los docentes para, a través de actividades que usan las TIC como metodología didáctica, usar los lenguajes de la música y/o de las artes visuales como método de aprendizaje de sus materias” (Inmaculada Contreras). El trabajo colaborativo y la creación de un grupo heterogéneo aporta no solo calidad y creatividad sino que forma la receta perfecta para construir innovación.
No son pocos los que se están haciendo eco del proyecto: Curalia de la Fundación Telefónica, Ineverycrea, Educ@conTIC, blogs especializados de profesores que aportan su granito de arena,… y es que no es para menos. En este proyecto se repensará la educación trabajando todas las áreas del conocimiento mediante una perspectiva creativa donde la sensibilidad artística es el eje central que tejerá mentes críticas demostrando la potencialidad de las artes plásticas y la música para integrar las competencias básicas, para desarrollar las capacidades del alumnado, y para apoyar las diversas áreas de conocimiento.

Las TIC tienen un papel decisivo en esta aventura ya que sin ellas no podríamos mantenernos en contacto ni trabajar de manera colaborativa. Queremos MusicArte tiene varios “centros de control”:

  • Google sites: donde se encuentra el desglose de todo el proyecto y las posibilidades de participación.
  • Blogger: con un blog del proyecto donde se muestran las colaboraciones de todos los profesionales que participan y participarán.
  • Google Docs: donde se recogen las participaciones
  • Google+: es la red social elegida para mantenernos en contacto, compartir información de interés e ir estructurando el proyecto
  • Scoop.it!: como herramienta de content curator (curador de contenidos) almacenando y difundiendo novedades del proyecto e información de interés.
  • Twitter: con el hastag #QMusicArte y la cuenta @QMusicArte como altavoces y receptores del propio proyecto

El proyecto no tiene límites y pretende repensar la educación, no solo artística, sino romper con las pedagogías conservadoras y metodologías habituales.

“(…) en el inicio del siglo XXI, la educación artística se sigue practicando en la esclavitud de un paradigma científico que no comprende el potencial mayor de las artes en la educación, a menudo se establecen límites mal equipados para la praxis del arte, basado en las artes de investigación, o las artes de pedagogía. (…) los profesionales deben repensar completamente la práctica de la educación artística sin límites taxonómicos y en el refugio del laberinto sin explorar” (Rolling, 2011: 99-104).

Promoviendo la colaboración no solo interna en el proyecto sino encontrando sinergias con otros como “Arrugas” o “El Barco del Exilio”, arrancamos.  Esperamos más y más colaboraciones para demostrar con esta experiencia la capacidad colaborativa, creativa e innovadora de un capital intelectual tan importante como son el profesorado, sea de arte o no lo sea. Unidos podemos lograr que los cambios cobren vida.

 

 

Bibliografía y webgrafía:

  • +Artistas: “Manifiesto en defensa de la educación artística” http://masartistica.blogspot.com.es/p/manifiesto-artisticas.html
  • Cobo Romaní, C; Moravec, John W. (2011). Aprendizaje Invisible. Hacia una nueva ecología de la educación. Col•lecció Transmedia XXI. Laboratori de Mitjans Interactius / Publicacions i Edicions de la Universitat de Barcelona. Barcelona. http://www.aprendizajeinvisible.com/download/AprendizajeInvisible.pdf
  • Contreras Sedes, Inmaculada (2012) Entrevista en Ineverycrea. http://ineverycrea.net/comunidad/ineverycrea/recurso/Entrevista-a–Queremos-Musicarte/565a3fc3-d825-492b-86f1-53faf2f98149
  • Cuevas Romero, Sara (2010), La creatividad en el proceso de enseñanza-aprendizaje como medio para fomentar la motivación del alumnado. Revista Didáctica en versión digital año III, nº 50, página 25-26. http://www.andaluciaeduca.com/hemeroteca/ae_digital50.pdf
  • Efland, A. D. (2002). Una historia de la educación artística. Tendencias intelectuales y sociales en la enseñanza de las artes visuales. Barcelona: Paidós.
  • Escaño González, C. (2010), Hacia una educación artística 4.0, Arte, individuo y sociedad, Vol. 22, Nº 1, págs. 135-144
  • Gardner, H. (1994), Educación artística y desarrollo humano, Barcelona : Paidós Ibérica.
  • López García, Camino (2011) “Redes sociales y educación artística” Capítulo del libro “Nuevas tecnologías en el aula” / coord. por Rosario Peña, 2011, ISBN 978-84-938898-0-7 , págs. 315-342  http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=3688068
  • López García, Camino (2012) “La evolución de la Educación Artística y su revitalización mediante el blog”, Dedica. Revista de Educação e Humanidades, ISSN 2182-018X, Nº. 2, 2012 , págs. 341-358  http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=3825670
  • López García, Camino (2012) “El trabajo colaborativo, ¿Es lo mismo que el grupal y el cooperativo? El valor añadido de las TIC” en el blog colaborativo TACTICAS http://tacticasc.blogspot.com.es/2012/10/el-trabajo-colaborativo-es-lo-mismo-que.html
  • Marín Viadel, R. (2011), La Investigación en Educación Artística, Educatio siglo XXI: Revista de la Facultad de Educación, Nº. 29, 1, págs. 211-230
  • NAEA. (2008). Creating a Visual Arts Education Research Agenda for the 21st Century, Arteducators. http://www.arteducators.org/research/NAEA_Research_Agenda_12-08.pdf
  • OECD. (s. f.). PISA en español,  pisa.oecd.org. http://www.pisa.oecd.org/document/25/0,3746,en_32252351_32235731_39733465_1_1_1_1,00.html
  • Robinson, K. (2009). The Element. Barcelona: Grijalbo.
  • Siemens, G. (2004) Connectivism: A Learning Theory for the Digital Age. http://www.elearnspace.org/Articles/connectivism.htm
  • Unalan, H. T. (2008). The effectiveness of collaborative learning applications in art education. The Journal of International Social Research, 1, 5 (2008) 870-879.

Citar como:

López García, C. (2013). “Trabajo colaborativo, redes sociales y educación artística: Presentando Queremos MusicArte.” Boletín SCOPEO Nº 77. 4 de Febrero de 2013. En línea: http://scopeo.usal.es/enfoque-bol-77-trabajo-colaborativo-redes-sociales-y-educacion-artistica-presentando-queremos-musicarte/   [Consulta: dd/mm/aaaa]

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